¿Vida en Encélado? Primero hay que estudiar un volcán submarino hawaiano
La sonda espacial Cassini se desintegró en septiembre de 2017 y, entre sus proezas, destaca el descubrimiento de una columna de agua, similar a un géiser, que era expulsada hacia la atmósfera desde debajo de la superficie helada de Encélado, la sexta luna más grande de Saturno. Las características de la columna de agua sugerían la presencia de actividad hidrotermal. Los científicos creen que tanto Encélado como Europa, uno de los cuatro satélites galileanos de Júpiter, parecen tener océanos líquidos y actividad hidrotermal bajo sus respectivas cortezas de hielo. Estas dos lunas son lugares adecuados en la búsqueda de vida potencial porque el agua interactuando con las rocas en los fondos marinos podría producir unas reacciones químicas que posibilitarían el metabolismo microbiano.
En su búsqueda de vida extraterrestre, la NASA se ha fijado en un objetivo terrestre: los manantiales que emergen de Lōʻihi, un volcán submarino que está formando la próxima isla del archipiélago de Hawái. Los manantiales burbujeantes de Lōʻihi, que se encuentra frente a la costa de la isla de Hawái, podrían contener lecciones valiosas en la búsqueda de vida extraterrestre, según reveló ayer la NASA en un comunicado. El proyecto SUBSEA (Systematic Underwater Biogeochemical Science and Exploration Analog) podría ayudar a diseñar las futuras misiones científicas que explorarán el Sistema Solar.
Lōʻihi es un volcán submarino que está formando la próxima isla del archipiélago de Hawái
El monte submarino Lōʻihi es interesante para la NASA porque el magma fundido emerge desde el medio de una placa tectónica, mientras que aquellas zonas en las que entran en contacto las placas tectónicas podrían ser demasiado cálidas como para proporcionar una representación realista de la actividad hidrotermal de las lunas de Júpiter y Saturno. Durante este 2018, la expedición SUBSEA a bordo del buque Nautilus, además de otros científicos e instituciones, estudiarán las condiciones que hay alrededor de los manantiales submarinos de Lōʻihi, bajo diferentes presiones y temperaturas.