Una base de datos para monitorizar a los sintecho: así quiere Nueva York saberlo todo sobre ellos

Nueva York tiene de 62.000 personas sintecho que duermen en los albergues de la ciudad, y alrededor de un 40% de ellos son niños. ¿Cómo se puede llevar un control sobre esta parte de la población? La oficina del ayuntamiento de la ciudad tiene una nueva idea: unificar los registros de las organizaciones que les atienden para crear una base de datos conjunta.

Quiénes son, qué albergues visitan, cuál es su historial médico o su vida laboral. Estos son, entre otros, los datos que más de 400 voluntarios recogen ya a diario de todos los sintecho de la ciudad, incluso los que duermen en la calle, y que a partir de ahora compartirán en una base de datos común que sólo los funcionarios autorizados y determinados empleados de organizaciones sin ánimo de lucro podrán consultar.

Así funciona el registro de los sintecho

El portal web desde donde los autorizados podrán consultar esta base de datos se llama StreetSmart. Con ella todas las organizaciones autorizadas y el propio Ayuntamiento podrán acceder a una visión integral de los datos que se van recopilando diariamente sobre cada una de las personas sin hogar de la ciudad.

El portal ha sido anunciado a sólo unos meses de las próximas elecciones en las que el alcalde Bill de Blasio busca seguir al mando de la ciudad. Y todo en medio de una crisis de personas durmiendo en las calles como no se había visto, según organizaciones como Coalition for the Homeless, desde la Gran Depresión.

Hasta ahora, los cerca de 400 voluntarios de varias organizaciones que recorren diariamente la ciudad para atender a este colectivo escribía sus informes, y cada uno de ellos se quedaba en la base de datos de la organización a la que pertenecen.

El problema con este método es que dos organizaciones podrían estar invirtiendo esfuerzos en obtener la misma información sobre la misma persona cuando esta hubiera ido de un punto a otro de la ciudad. Y aquí es donde entra StreetSmart con la intención de unificar todos estos datos.

Una de las finalidades para las que puede ser utilizado este portal, la más optimista, es la de que los empleados de estos albergues tengan unas herramientas que les ayuden a saber qué necesidades puede tener un nuevo visitante que no conocen dependiendo de su pasado. Aún así habrá que esperar hasta que lleve un tiempo en marcha para ver hasta qué punto es efectivo y agiliza la manera en la que se le puede ayudar a estas personas.

El portal también tiene una opción de mapa que mostrará dónde se están formando campamentos de sintecho y en qué zonas se están encontrando a más personas en problemas los trabajadores sociales. Con ello la ciudad puede beneficiarse teniendo una mejor comprensión de cómo se mueven y evolucionan estos colectivos, ya sea para ayudarles o para diseñar cualquier otro tipo de plan basado en esos datos reales.

¿Es una medida suficiente?

Desde el ayuntamiento venden la idea de que gracias a esta nueva tecnología podrán unificar esfuerzos haciendo que su red de albergues sea más eficiente. Pero a otras voces y organizaciones no se les escapa la coincidencia del anuncio con el calendario político, y avisan que es una medida a medias que sólo tapa parcialmente un problema mucho mayor.

¿Qué pasará con estas personas una vez salgan de la calle? Un albergue no es una solución definitiva, y organizaciones como la Coalition for the Homeless avisan que no habrá solución a largo plazo hasta que se empiece a controlar la subida desproporcionada de los precios de la vivienda para hacerlas más asequibles.

También está el debate sobre la privacidad, aunque para evitarlo sólo funcionarios y los empleados autorizados de determinadas organizaciones puedan tener acceso al historial médico o laboral de las personas a las que atienden.

Crear un censo online de sintecho puede ser una medida controvertida. Si se utiliza para lo que promete el ayuntamiento puede ser útil, aunque también tiene potencial para ser un arma de doble filo. Aquí habrá que tener fé en las organizaciones que, como Project Hospitality in Staten Island o BronxWorks, han colaborado con el equipo tecnológico del Ayuntamiento de Nueva York para desarrollar el portal.

Imágenes | Rui Duarte y WIRED
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