¿Son los iPad Pro 2018 de Apple más rápidos que la mayoría de portátiles?
El pasado martes, Apple presentó, junto con sus renovados MacBook Air y Mac Mini, la tercera generación de los iPad Pro, que según la compañía serían más rápidos que el 90% de ordenadores portátiles del mercado.
Una afirmación osada, pero que responde al posicionamiento de los nuevos iPadsPro, cada vez más potentes –y caros–, claramente diseñados para competir en prestaciones con la mayoría de portátiles, incluso con los propios MacBook de la compañía.
La pieza clave que permite a Apple sostener esa afirmación es el nuevo chip que equipa sus tabletas profesionales, el A12X Bionic. Se trata de una variación del A12 Bionic que encontramos en los últimos iPhone XS y XR, pero que incluye 8 núcleos en vez de 6 y que contiene un 45% más de transistores para llegar a la imponente cifra de 10.000 millones. También incluye el Neural Engine para algoritmos de aprendizaje automático –machine learning– y de realidad aumentada –AR–.
Unas especificaciones bastante impresionantes, que justifican en parte el posicionamiento y precio de los nuevos iPads Pro. Pero ¿son realmente más rápidos que la mayoría de portátiles? A tres días de su presentación, es todavía pronto para sacar conclusiones en cuanto a su rendimiento en la práctica, pero no para hacerse una idea de su potencial, a la vista de los primeros resultados publicados en la página de benchmarks de Geekbench, que permite comparar las prestaciones “brutas” de diferentes dispositivos con distintas plataformas.
En efecto, las cifras mostradas dan cuenta de la potencia de estos iPad Pro, capaces de rendir a un 90% del MacBook Pro de 15″, tope de gama de los portátiles de la firma californiana, y uno de los modelos más potentes del mercado. Dicho de otro modo: los nuevos iPads Pro rendirían por encima de la mayoría de portátiles equipados con procesadores Core i5 y Core i7 de Intel.
Todo parece indicar, pues, que es una cuestión de tiempo que Apple decida usar sus propios chips de la familia A –basados en una arquitectura de tipo ARM– para sus ordenadores portátiles, en detrimento de los actuales procesadores Intel –basados en la arquitectura x86–. De hecho, algunos fabricantes ya hacen lo propio con los Snapdragon de Qualcomm, lo que permite mejorar sustancialmente la autonomía de estos portátiles. El problema ahora es la adecuación de los actuales sistemas operativos a este tipo de “chips móviles”.
Otro cambio no ha pasado inadvertido es el abandono del omnipresente conector Lightning por un puerto de tipo USB-C, que acompaña al Smart Connector propio de la marca. Lamentablemente, no es conforme a la norma Thunderbolt 3, pero al menos no se trata del USB-C “lento”, pues responde a la especificación USB 3.1 Gen 2 de 10 Gbps.
Se trata de un importante cambio para la compañía, que abre la puerta a usar nuevos accesorios compatibles con este puerto y que permitirá una mejor integración con el resto de los dispositivos del mercado. Algo a lo que Apple no nos tiene acostumbrados, pues habitualmente sus dispositivos, al menos a nivel de conectividad, suelen ser bastante limitados.
De este modelo, es posible ahora conectar pantallas externas con una resolución de hasta 5K, lo que facilitará la integración del iPad Pro en el flujo de trabajo de muchos profesionales. En este sentido, la compañía recordó la llegada de la versión completa de Photoshop CC para iPad, tal como anunció Adobe hace unas semanas.
A nivel de diseño, los nuevos iPads Pro se presentan en tamaños de 11″ y 12,9″, con una pantalla prácticamente sin bordes gracias a la eliminación del tan popular botón de inicio de Apple, siguiendo la estela iniciada con los iPhone X. Al igual que este último, se hace uso del sistema de reconocimiento facial Face ID como sustituto del reconocimiento de huellas dactilares.
La tecnología de las pantallas responde a la denominación “Liquid Retina“, lo que indica el uso de paneles de tipo IPS como en los iPhone XR, pero no de tipo OLED como en iPhone XS. La densidad de píxeles se mantiene en los 264 ppp.
Asimismo, son compatibles con los nuevos teclados Smart Keyboard Folio así como con teclados inalámbricos Bluetooth. Además, los iPad Pro vienen acompañados del Apple Pencil de 2ª generación, que se une magnéticamente a estos para cargarse de forma inalámbrica mediante inducción. Accesorios que, como es costumbre, no son baratos: habrá que desembolsar 135 € por el lápiz táctil y 200 o 220 € –según modelo– para los teclados “inteligentes”.
En cuanto al espacio de almacenamiento se refiere, las capacidades van desde los 64 GB hasta 1 TB, una cifra que permiten alinearse con las especificaciones de los portátiles más potentes.
Disponibles a partir del próximo 7 de noviembre de 2018, el precio de salida de los nuevos iPads Pro es de 880 € para el modelo de 11″ con 64 GB y sin conexión celular, que se eleva hasta los 2.100 € para el modelo de 12,9″ con 1 TB y conexión celular incluida. Apple mantiene igualmente el antiguo modelo de iPad Pro de 10,5″ de 2017 a 730 €.
Más información en la nota de prensa oficial y en la web de Apple.