muy útil en marketing, pero también un lastre
Una de las cuestiones que están protagonizando las decisiones de los responsables de marketing y de en qué invierten sus presupuestos y qué centra sus gastos es la tecnología. En un entorno en el que hacer lo que tienen que hacer es cada vez más complicado y en el que no les queda más remedio que echar mano de la tecnología, los responsables de marketing quieren tener las últimas herramientas de marketing y las más adecuadas para poder sacar todo el potencial a lo que hacen y cuándo lo hacen.
Quieren que la tecnología les permita ser mucho más eficientes y mucho más efectivos y que los guíe en la cada vez más complicada conquista del mercado y de los consumidores.
A su disposición tienen cada vez más herramientas y cada vez más soluciones. Los marketeros se mueven así por una amplia oferta de soluciones que proponen hacerles la vida más fácil, solucionar sus problemas en lo que a la industria se refiere o conectar mejor con los consumidores.
Pero ¿se está convirtiendo esta tecnología también y de un modo indirecto en un lastre?
De hecho, los últimos estudios ya apuntan en esa línea. Como explican desde eMarketer, a medida que hay más compañías ofreciendo soluciones tecnológicas para la industria del marketing y a medida también que los marketeros tienen más donde escoger e implementan más estas soluciones se va creando un nuevo problema. Cada vez es más complicado desarrollar una estrategia coherente en marketing y hacer las cosas de un modo simple porque cada vez hay más tecnología de por medio.
Cómo la tecnología se ha convertido en un lastre
La apreciación viene marcada por lo que los propios responsables de marketing dicen. Como acaba de demostrar un estudio, realizado este octubre por Ascend2 entre una muestra de marketeros global, la mitad de los encuestados cree que integrar sistemas dispares en tecnología es lo que se está convirtiendo en una barrera para desarrollar estrategias exitosas partiendo también de esa tecnología.
Esto es: puede que la tecnología permita hacer muchas cosas y logre dar muchas opciones en lo que a conectar con el consumidor toca, pero lo cierto es que esa múltiple oferta está haciendo que las cosas sean más complejas. Tener tanto disponible hace que integrarlo todo en un único punto sea muy difícil.
De hecho, ahora mismo, y aunque no es una de las principales prioridades de los responsables de marketing, para ellos integrar los sistemas dispares tecnológicos es ya la principal barrera que la tecnología crea para tener éxito. Puede que para un 65% la prioridad sea aumenta el ROI y para un 57% mejorar la eficiencia del marketing, pero un 52% tiene claro (el mayor porcentaje con diferencia) que la falta de integración es un lastre.
¿Cuáles son los terrenos que se convierten en un problema mayor y los que lastran más las cosas?
Uno de los espacios en los que las marcas usan más herramientas diferentes es la publicidad programática. Dado que emplean muchos vendedores, y muchos distintos, tienen que emplear plataformas diversas que hacen que se muevan entre tecnologías variadas. Esto también hace que seguir esas campañas y procesar los datos implique partir de muchas cosas distintas y requiera más tiempo y más esfuerzo.