Hablamos con Cristina de Middel sobre ‘Players’
El Espacio Fundación Telefónica de Madrid alberga, en el marco de exposiciones relacionadas con PHotoEspaña 2018, la muestra ‘Players; Los Fotógrafos de Magnum Entran al Juego‘, comisariada por Cristina de Middel –dentro de su ‘Carta Blanca‘ para esta edición del festival– y Martin Parr. Abierta al público desde hoy mismo, el día de ayer sirvió para presentar la muestra a los medios y para que tanto De Middel como Parr hablasen de su concepto expositivo conjunto para esta ‘Players’.
Centrada en la faceta más lúdica, espontánea y cercana de los fotógrafos que componen el extenso plantel de la Agencia Magnum, la exposición hace un repaso de la cara más amable de estos autores a través de cerca de dos centenares de imágenes. En la misma encontraremos importantes nombres en la fotografía del S.XX tales como los de Paolo Pellegrin, Susan Meiselas, Bruce Davidson o Cristina García Rodero entre los 46 fotógrafos participantes. Si bien normalmente se asocia el nombre de Magnum a un fotoperiodismo crudo, capaz de narrar mediante imágenes las miserias del ser humano, la selección de imágenes de los comisarios muestra la versatilidad de estos autores con el concepto del juego como eje principal.
Durante la presentación, los comisarios y el equipo de organización explicaron a la prensa el leitmotiv de la muestra, su concepto expositivo e hicieron un repaso del contenido de la misma, en el que podremos encontrar diferentes conceptos de diversión y juego siempre con la particular mirada de los fotógrafos de la Agencia Magnum. Así, la serie de Harry Gruyaert en los JJOO de Munich de 1972, las imágenes de Elliott Erwitt en el sur de España o los documentos fotográficos de David Hurn en el Festival de la isla de Wight de 1969 reflejan esta tremenda variedad de contenidos de la que goza la exposición.
Tras un recorrido por la muestra de la mano de Martin Parr, quien explicó las imágenes que contiene y dio su particular opinión del concepto del juego, pudimos hablar más de cerca con Cristina de Middel para que nos contara su visión de ‘Players’.
Nota: el siguiente texto no es una transcripción literal del contenido de la entrevista, sino que reproduce las ideas en ella contenida de la forma más fidedigna posible. Ciertas partes pueden haber sido resumidas, pero en ningún caso se ha alterado, al menos de forma voluntaria, el sentido de las opiniones e informaciones aportadas por ambas partes. Las aclaraciones y textos de apoyo son expresadas en cursiva.
El componente irreverente es una constante en tu trabajo fotográfico y en el de Martin Parr. ¿Cómo ha sido el proceso conjunto de construcción de este escenario, la elección de su tono y su intención?
Martin y yo tenemos varias cosas en común, no sólo fotográficamente hablando sino en la vida. Tenemos un volumen de trabajo muy grande y estamos contentos con ello, y a los dos nos encanta lo que hacemos, lo que nos permite estar perfectamente alineados en ese aspecto. Básicamente, le lancé la idea a Martin y él rápidamente aceptó la propuesta.
En ese momento yo estaba en Brasil y él en Inglaterra, así que manteníamos contacto vía internet, revisábamos el archivo de Magnum en busca de imágenes que nos interesaran a los dos y, poco a poco, fuimos conformando las elegidas para la exposición. Una vez seleccionadas, intentamos adaptarlas a las posibilidades del espacio expositivo y a la narrativa que queríamos transmitir según las acepciones que tiene el término player, sobre todo en la lengua inglesa. Ha sido un proceso muy intuitivo que nunca olvidaré.
¿Qué tiene “Players” de tu manera de entender el mundo y por extensión la fotografía?
‘Players’ tiene todo que ver conmigo y con mi forma de entender lo que me rodea. Entiendo la vida a través del sentido del humor y eso se ve reflejado en mi trabajo, que siempre está más lleno de preguntas que de respuestas. No hago esto así por quitarle valor o por buscar el chiste, sino porque creo en la comedia como una gran arma de crítica.
En la exposición hemos intentado que ese punto crítico desde el humor esté también presente. Hay iconos de Magnum presentes –Bruce Gilden, Elliott Erwitt, etc–, pero también hay otros fotógrafos que confirman la diversidad y el talento de los componentes de la Agencia. En Magnum también hay comedia.
Efectivamente, no todo en Magnum se nutre del fotoperiodismo crudo, también hay una cara amable y divertida que merece la pena ser resaltada, pero ¿por qué elegir este componente lúdico como eje principal de la exposición?
En la exposición, y en general dentro de la fotografía, el componente lúdico es fundamental. Yo intento conservar esa exploración, esa motivación inicial por la que los fotógrafos decidimos salir a hacer fotos. Cuando te profesionalizas y comienzan a ponerte etiquetas, todo eso se pierde en gran parte. Pero yo creo que aún se puede hablar desde una posición segura y respetable sin perder esa parte lúdica de uno mismo, y ya no sólo dentro de la fotografía, sino en cualquier disciplina artística.
La muestra cuenta con alrededor de 200 imágenes muy diferentes entre sí, pero con el juego y los jugadores como punto de encuentro. Entre todo este abanico de fotografías, ¿tienes tú una incorporación “favorita” en este álbum heterodoxo –divertido y disruptor– que has creado?
Realmente, con un proceso de selección tan exhaustivo como el que Martin y yo misma hemos llevado a cabo, podría decir que todas las imágenes que componen la muestra son mis favoritas. Si tengo que nombrar alguna que me hace especial ilusión, sería la de Alec Soth –perteneciente a su serie ‘Sleeping by the Mississippi’– que sirve perfectamente para explicar cómo Magnum, a través de sus iconos, en realidad tiene un diálogo en torno al juego.
Dentro de este juego, nos interesan especialmente la incorporación de personajes tan dispares como el camaleónico Samuel Fosso y sus autorretratos con fondos de papel pintado o la instagramer Anna Hell, rondando el humor, la crítica y el surrealismo con sus caras pintadas sobre la espalda. ¿Por qué apostar por estos fotógrafos menos conocidos?
Para mi, hay una suerte de activismo dentro del mercado de la fotografía y creo que es importante dar visibilidad a otras voces que vengan de otros contextos, geográficamente –como el caso de Samuel Fosso– o de otros escenarios –como Anna Hell–. No tendría mucho sentido que, con mi discurso fotográfico, optase sólo por dar visibilidad a autores ya consagrados.
Por eso en mi proceso de selección de autores fue importante la presencia de autores africanos que considero importantes y también de fotógrafos cuyo trabajo no estamos acostumbrados a ver en las galerías, pero que goza de una potencia brutal aunque su espacio expositivo venga de otras plataformas. Además, intenté que hubiera el mismo número de hombres que de mujeres en mi selección final, ya que considero que la fotografía es, además de una herramienta de comunicación, una herramienta de cambio social.
La exposición permanecerá abierta hasta el próximo día 16 de septiembre de 2018. Además, el Espacio Fundación Telefónica ha organizado numerosas actividades en torno a la muestra, que dispondrán talleres y charlas gratuitas para el gran público. Más información en la web oficial del Espacio Fundación Telefónica.