Encuentros CP+ 2018 – Fujifilm y su nuevo buque insignia X-H1
Fotografías por Núria Agustí
Yokohama – Presentada dos semanas antes del inicio de la CP+ 2018, la Fujifilm X-H1 fue, sin duda, la principal atracción de la compañía en la feria. En esta nueva cámara –la de más alta gama de la firma, exceptuando la GFX de formato medio– centramos nuestro encuentro con los responsables de Fujifilm, que tuvimos la oportunidad de entrevistar durante nuestra estancia en Japón.
Nuestras primeras cuestiones acerca de la X-H1 se versan sobre su tamaño. En cierto modo, este notable incremento de las dimensiones –con respecto a los modelos anteriores– hace replantearse ciertas de las supuestas ventajas de las mirrorless de las que habitualmente hacen gala los fabricantes, y no es otra que su tamaño más reducido con respecto a las cámaras réflex.
“Lo cierto es que el ‘feedback’ que obtuvimos por parte de los usuarios es que querían una cámara más grande, especialmente un ‘grip’ de mayores dimensiones para mejorar su operatividad“, se justifican los responsables de Fujifilm que nos acompañan en la entrevista, entre los que se encuentran Jun Watanabe y Shu Amano.
Aun así, ¿se podría haber hecho más pequeña o existe alguna limitación técnica que lo impidiera? “No, tampoco se podía hacer más pequeña, debido al sistema de estabilización en el cuerpo –IBIS–, que necesitaba de una estructura mecánica más contundente”. “De todos modos –prosiguen– es todavía más pequeña que una DSLR equivalente“.
“[La Fujifilm X-H1] tampoco se podía hacer más pequeña, debido al sistema de estabilización en el cuerpo –IBIS–, que necesitaba de una estructura mecánica más contundente – Jun Watanabe (Fujifilm)”
Hablando del nuevo sistema de estabilización en el cuerpo, preguntamos sobre la posibilidad de utilizarlo para incorporar un modo de alta resolución como hacen ya otros fabricantes. “Técnicamente es posible, sí, aunque de momento no tenemos planes de incorporarlo.” A lo que, rápidamente, añaden: “¿Creéis que sería interesante incorporarlo?”
Les respondemos que, si bien no se trata de algo estrictamente necesario, sí que representa una opción muy interesante para ciertas situaciones donde se necesita de ese extra de resolución, especialmente en este formato APS-C, más limitado en estos aspectos que sensores de mayor tamaño.
Por otro lado, el reciente anuncio de la Sony α7 III supone la llegada de un posible competidor directo de la Fujifilm X-H1, conviviendo en un rango de precios similar. De hecho, la nueva Sony no es mucho más cara e incorpora un sensor de “formato completo” (24×36 mm). “Es posible“, nos contestan, “pero consideramos que, globalmente hablando, el sistema de Fujifilm es más equilibrado“.
¿Habláis de vuestras ópticas, con un tamaño más acorde? “En efecto, creemos que nuestras ópticas, mucho más equilibradas, son una ventaja“. Tras una breve pausa, reconocen: “Sin embargo, es cierto que ellos [Sony] tienen un mejor marketing; eso es algo que debemos mejorar“.
Si bien Fujifilm reconoce que la nueva Sony α7 III es una posible competidora, consideran que su sistema –cámara más ópticas– es todavía más equilibrado.
Recientemente, Fujifilm lanzó al mercado sus ópticas Fujinon MK-X, las versiones para montura X de sus objetivos de vídeo y cine para producciones de presupuesto ajustado. Unas ópticas que se ajustan especialmente bien con la nueva X-H1 que, gracias a su mayor tamaño, permite un mejor agarre y equilibrio general con las mismas.
Sin embargo, de momento solo existen dos referencias –las Fujinon MK-X 18-55 mm y el 50-135 mm T/2,9–. ¿Veremos pronto nuevos modelos en el mercado? “Sí, seguramente, aunque ello dependerá en gran medida del éxito que cosechen los actuales modelos“.
Hablando de vídeo, está claro que la nueva X-H1 es un salto adelante con respecto la anterior X-T2, que hasta ahora mismo era el modelo con más prestaciones en este aspecto. Cabe aquí preguntarse cómo evolucionará ésta última ahora que la X-H1 ha tomado el relevo como nuevo buque insignia.
“La X-H1 está orientada como un producto híbrido para fotografía y vídeo, mientras que la X-T2 está enfocada principalmente para fotografía, por lo que [ésta última] evolucionará sobre todo en este aspecto“. Parece, pues, que aquellos usuarios que quieran disponer de los avances más significativos en vídeo deberán decantarse por la X-H1, sobre todo si se desea contar con el sistema de estabilización más potente, pues el IBIS solo está disponible –nos recuerdan– en ésta última.
A pesar de ello, les comentamos que Fujifilm es conocida por “cuidar” a sus usuarios con continuas actualizaciones de firmware –incluso en modelos que llevan ya unos cuantos años en el mercado, algo poco común–. ¿Podremos ver algunas de las mejoras de vídeo introducidas en la X-H1 en la actual X-T2 –sobre todo teniendo en cuenta que comparten el mismo procesador de imagen–? “Sí, algunos modelos serán actualizados con algunas de estas novedades, pero aún hemos de decidir cuándo se hará“.
¿Cómo evolucionará la X-T2? En Fujifilm reconocen que la nueva X-H1 llevará la batuta en los aspectos de vídeo, si bien algunas de las mejoras de esta última se incorporarán en un futuro en las demás cámaras mediante actualizaciones de ‘firmware’.
En este sentido, preguntamos sobre la posibilidad de que Fujifilm ofrezca un servicio de actualización parecido al de Ricoh con su nueva Pentax K-1 Mark II –en el que se reemplaza parte de los componentes de hardware de la cámara–, con el objetivo de luchar contra la obsolescencia tecnológica.
“Diseñamos las cámaras como un todo, es difícil pues plantearse una actualización de este tipo, pues lo que buscamos es mantener un equilibrio“, aseguran. “Cambiar el procesador implicaría cambiar parte del diseño involucrado en su disipación, por ejemplo“. Y añaden: “Sí pensamos en qué algunos aspectos más pequeños puedan ser personalizados, pero más bien detalles“.
Con respecto a la disipación, preguntamos sobre el nuevo acabado exterior de la X-H1 –8H surface hardness, según las especificaciones oficiales–, que hace uso de un revestimiento más avanzado que en la X-T2. “En efecto, en la X-T2 utilizábamos una dureza 6H, mientras que en la X-H1 es 8H, gracias a sus nuevas partículas de pintura aplicadas. Además, la disipación de calor se mejora en un 25 %“.
Por lo que se refiere a la batería, los 300 disparos anunciados en las especificaciones oficiales no parecen satisfacer a muchos usuarios, sobre todo a aquellos que planean usar la cámara de forma profesional. ¿Se consideró en algún momento, durante la fase de diseño, la opción de desarrollar un nuevo modelo de batería más potente aunque más grande?
“Se trataba de encontrar un compromiso entre tamaño y autonomía, además de mantener la compatibilidad con las cámaras existentes. Para aquellos usuarios que necesitan de una mayor autonomía, optarán por el grip externo con batería adicional“.
Si bien la X-H1 es un modelo donde las prestaciones de vídeo tienen un peso importante, existen en el mercado actual fabricantes que apuestan por modelos específicos, habitualmente versiones de sus modelos estándar pero equipados con sensores de menor resolución –pero suficiente para grabación de vídeo, menos exigente en este aspecto que la fotografía–.
Pensamos en la familia Sony α7S pero también en la reciente Panasonic GH5s… ¿veremos en el futuro una posible X-H1s? “No lo tenemos previsto; de momento nos queremos focalizar en un producto híbrido foto/vídeo, aunque quizá en el futuro nos lo podríamos plantear, en función del éxito que tuviera el vídeo.”
Por otro lado, nos recuerdan que la X-H1 incorpora también un nuevo modo de simulación cinematográfica –Eterna– diseñado para ofrecer una mayor flexibilidad de las tomas en postproducción.
Llegamos al final de nuestra entrevista, y nos interesamos por la futura evolución de su sensor X-Trans, actualmente en su tercera generación. ¿Cuál sería el siguiente paso para la siguiente generación? ¿Quizá un sensor de 32 Mpx, capaz de gestionar grabación de vídeo en 8K en un futuro? “Los [actuales] 24 Mpx son un buen compromiso por ahora. Por otro lado, aumentar la resolución tampoco incrementaría mucho la calidad, debido a las limitaciones de las ópticas“.
Dejando de un lado la resolución, ¿en qué puntos puede aún mejorar el sensor para seguir haciendo frente a los captores de “formato completo”? “El rendimiento del AF podría ser mejorado. La zona de AF cubierta por nuestras cámaras es más pequeña que la de nuestros competidores, si bien la mayoría de usuarios usan la zona central, lo que en la práctica no es una gran desventaja. Sin embargo, es un aspecto que debemos mejorar“.
Si bien no hay planes previstos –a corto plazo– para aumentar la resolución de su sensor X-Trans, en Fujifilm reconocen que deben mejorar el aspecto del AF, pues este cubre una zona más pequeña que la mayoría de sus competidores.
¿Algún cambio previsto para la actual matriz de patrón 6×6, teniendo en cuenta que el incremento de potencia de los procesadores actuales podría gestionar una mayor cantidad de datos y, por tanto, una matriz de mayor tamaño más “aleatoria”? “No, nuestra actual matriz de 6×6 funciona bastante bien, no hay necesidad de cambiarla“.
Agradecemos a los responsables de Fujifilm el tiempo acordado para la entrevista y esperamos volver a encontrarnos en la próxima edición –la décima– de la CP+ de Yokohama.