Cómo controlar el color en la fotografía digital (II)

De nuevo retomamos el tema del color para conseguir que nuestras fotografías mejoren desde el momento del disparo hasta el revelado. La colorimetría suele aplicarse en fotografía de producto y moda pero pocas veces se habla del tema en paisaje o reportaje. Hoy vamos a definir el color y entender cómo funcionan los diferentes modos de color digital.

El origen del color es algo que lleva preocupando a la humanidad desde el principio de los tiempos. Hay numerosos estudios sobre el uso del color en la Prehistoria. Sobre la función del negro del carbón o el ocre de la tierra arcillosa. Los egipcios consiguieron el verde de la pulverización de la malaquita, un mineral… los mayas lograron un rojo explosivo a partir de la cochinilla, un pequeño insecto… siempre fue un color difícil de conseguir.

El color en la historia

Los primeros estudios sobre el color se remontan al tiempo de Aristóteles. Él sugirió que los colores tienen su origen en la mezcla de los cuatro colores básicos que provienen de la tierra, el fuego, el agua y el cielo. Y valoró la importancia de la luz y la sombra en su formación.

Leonardo da Vinci apostó por el blanco como el color principal pues admitía en su mezcla a todos los demás. Y situó el origen del negro en la oscuridad, que nos priva de todo. Pero el primer descubrimiento científico del color se lo debemos a Isaac Newton (1676) y su famoso prisma. Si filtraba un rayo de luz en un prisma de vidrio se descomponía en bandas de color rojo, naranja, amarillo, verde, añil y violeta. Y definió el color como un fenómeno de la luz.

La fuerza del color

Pero gracias a Johann Wolfgang von Goethe, famoso escritor y científico, llegamos a la teoría que hoy seguimos analizando y dando por cierta en todos los estudios que encontramos sobre el tema. A él no le debemos solo el ‘Fausto’, una obra clásica de la literatura universal, sobre un pacto con el diablo a cambio de la divina juventud. Gracias a él se iniciaron los estudios del color y sus armonías, así como la influencia que tienen en el ser humano.

A él le debemos la rueda de color que está siempre presente en Capture One o Adobe Photoshop. Él fue quien habló de la psicología del color que todavía seguimos aplicando una y otra vez en la cultura occidental. Como buen poeta de la época se esforzó por encontrar una explicación romántica a este problema, con una lucha entre las luces y las tinieblas.

A partir de Goethe han evolucionado todos los estudios que tenemos ahora entre manos y las teorías de las que nos vamos a ocupar en esta serie de artículos en los que vamos a explicar los modos de color, las armonías y sobre todo cómo llevarlo a la práctica en nuestras fotografías de paisaje y reportaje.

La luz y el color

El color es luz. Vemos color por la luz que incide sobre los objetos. Y lo más curioso de todo es que percibimos el color que reflejan las superficies. No el que absorben. Una rosa es roja porque es la única longitud de onda que nos deja ver y hace que la percepción del color sea totalmente subjetiva. Nunca sabremos si el color que estamos viendo es el mismo que percibe nuestro vecino. Así de sencillo y complicado a la vez.

¿Pero qué es el color? Hay muchas definiciones pero esta es muy clara:

Una sensación provocada por diferentes longitudes onda e intensidades luminosas al incidir sobre los conos de la retina.

Dentro de la fotografía digital tenemos varios modos de dar forma al color:

Aditivos, la suma de los colores da blanco.
Sustractivos, la suma de los colores da negro.

La rueda de color

Y para evitar confusiones, vuelvo a señalar que estamos trabajando dentro del campo de la fotografía, de la luz. Digo esto porque a todos en las clases de dibujo del colegio nos decían que los colores primarios eran el Rojo, el Amarillo y el Azul. Y siempre creábamos el naranja con los dos primeros y nos creíamos magos. Pero no tiene sentido en nuestro campo:

Modo RGB, básico en la fotografía, es un modelo aditivo. La suma del Rojo, el Verde y el Azul da como resultado el blanco.
Modo CMYK es un modelo sustractivo que parte del azul cyan, el rojo magenta y el amarillo. La suma de los tres más el negro (K) nos da negro absoluto. Y está destinado al mundo de las imprentas en la que se trabaja con pigmentos y no con luz.

Pero para complicar más las cosas en el artículo de hoy tenemos que entender cómo se puede definir el color y conseguir expresarlo mediante números. Es el momento de hablar de la representación HSB, las tres siglas que definen el color: el Tono (H), la Saturación (S) y la Luminosidad (B). Y que tan bien representados están en la rueda de color de nuestros programas favoritos.

Se puede definir de muchas formas pero no vamos a complicar todavía más el fin del artículo. Así que vamos a lo más sencillo y efectivo:

Tono: es el color en sí. El rojo, el verde, el azul, separados en la rueda de color en un radio de 30º.
Saturación: es la pureza de ese color
Luminosidad: la cantidad de luz que tiene ese tono.

Aquí tenemos los colores

Siempre partiremos de un tono determinado que tendrá más o menos Saturación o Luminosidad. Todos estos datos los podemos ver en diversas aplicaciones y páginas como Adobe Color o en la ventana del Selector de color de Adobe Photoshop, en los datos numéricos de la parte derecha o en la propia ventana Información.

Antes de empezar a trabajar con nuestras fotografías, solo nos queda aprender y entender las armonías del color o de una forma clara, descubrir de una vez qué colores combinan mejor con otros. Y quién sabe, a partir de ahora igual empezamos a salir a la calle mejor vestidos con solo saber leer la rueda de color.

Para la próxima semana espero que tengáis localizada la ventana Adobe Color en Adobe Photoshop. Solo hay que ir al menú Ventana>Extensiones>Tema de Adobe Color.