Las Palmas de Gran Canaria, un paseo con Pérez Galdós
Benito Pérez Galdós llegó por primera vez a Madrid en tren desde Ciudad Real en 1863. Tenía 19 años y había dejado su Canarias natal con la intención de estudiar derecho. Pero al poco, el joven aspirante a universitario descubrió que le faltaba vocación para seguir con sus estudios: prefería callejear día y noche por el Madrid fascinante de la época y tomar notas de todo lo que veía. Lo hizo con tanto empeño que convirtió la ciudad en un personaje más de sus novelas realistas.
Cuando pensamos en Galdós pensamos en Madrid, del mismo modo que ocurre con Londres y Dickens, París y Balzac o Lisboa y Pessoa. Pero antes del Madrid galdosiano está Las Palmas de Gran Canaria como su patria chica. Ahora, una ruta turística autoguiada muestra los escenarios de la ciudad vinculados a la infancia y juventud de Benito Pérez Galdós.
Todo el mundo lo sabe, de Las Palmas
Incluso años después de su llegada a Madrid, ya un anciano al que le quedaba el gabán grande, ciego y autor de una abundante bibliografía, Galdós se encargó de dejar muy claro su lugar de procedencia. De hecho, cerca de su Casa-Museo, en Calle Cano, nº 6, se puede leer en bronce, para que nadie lo vuelva a olvidar, lo que respondió cuando le preguntaron que de dónde era: “¿Que de dónde soy? Hombre, si eso todo el mundo lo sabe: de Las Palmas”.
"Vine a Madrid el 63 y estudié la carrera de leyes de mala gana; allá, en el Instituto, fui bastante aprovechado; aquí todo lo contrario" (Galdós)
Para visitar la Casa-Museo de Galdós hay que llegar al barrio de Vegueta, en el centro histórico de Las Palmas de Gran Canaria. Es difícil imaginar aquella otra ciudad de cuando nació el autor, la de 1843. Una ciudad con solo dos barrios, Triana y Vegueta, dentro de las murallas, sin luz eléctrica, en letargo. Nada que ver con la de hoy, cosmopolita, abierta y amable. Tal vez los perros de bronce de la Plaza de Santa Ana, sean los únicos que guarden memoria de aquellos otros tiempos. La Catedral preside la plaza que es el epicentro del barrio histórico. Paseando por esta parte de la ciudad, en la que abundan las casas coloniales, comenzaremos a entender el vínculo entre Las Palmas y Galdós.
La ruta de Pérez Galdós en Las Palmas de Gran Canaria
La nueva propuesta amplía la oferta de rutas culturales para conocer Las Palmas de Gran Canaria, una ciudad literaria que se pasea y se lee. Partiendo de los barrios de Vegueta y Triana, se descubren enclaves importantes en la vida de Galdós, como la Iglesia de San Francisco, donde el autor fue bautizado, o el Gabinete Literario del S. XIX donde comenzó a instruirse en el arte. La Catedral de Canarias, la Catedral Basílica de Santa Ana, es el monumento más importante de la arquitectura de las islas e inspiró al joven autor para crear el personaje romántico de su cuento “Necrología de un Prototipo”. Atravesando la plaza de Santa Ana, llegamos a las Casas Consistoriales, donde en su emblemático Salón Dorado podemos contemplar un busto de Galdós. En este edificio, en 1912, se aprobó proponer al autor como posible Premio Nobel de Literatura. Aunque, como tantos otros maestros, no logró la distinción por motivos más sociales que de calidad literaria.
El Museo Canario, donde se expone el mobiliario de la habitación donde murió el escritor, el Palacio de Justicia de Canarias, el Convento de San Agustín, el actual Teatro Pérez Galdós, o la Calle Mayor de Triana, el espacio favorito del autor para sus juegos infantiles, son otros de los lugares emblemáticos que se pueden visitar para conocer el vínculo entre Galdós y Las Palmas de Gran Canaria.
Y es que Gran Canaria no es solo la suma de sus playas y paisajes: es mucho más, también, la suma de su memoria cultural. De ella forma parte, sin duda, Benito Pérez Galdós.