McLaren W1 domina el Ártico y valida su potencia híbrida
El McLaren W1 culmina pruebas árticas, optimiza chasis, control de tracción y su híbrido V8 de 1.258 HP para garantizar desempeño y durabilidad bajo cero.
Bajo un cielo gris y temperaturas que caían muy por debajo de cero, varios prototipos del McLaren W1 se deslizaron sobre lagos helados del Círculo Polar Ártico durante las primeras semanas de 2025.
El objetivo: exprimir al límite cada sistema crítico del nuevo hiperauto híbrido —desde el control de tracción y la vectorización de par hasta la respuesta del chasis activo— en las condiciones de adherencia más bajas que un conductor pueda encontrar fuera de un circuito profesional.
Esta campaña extrema forma parte del exhaustivo programa de validación que precede al lanzamiento del modelo más potente en la historia de McLaren. Con 1.258 HP y 1.340 Nm generados por un inédito tren motriz híbrido V8, el W1 necesitaba demostrar que su descomunal entrega de potencia puede manejarse con total seguridad incluso cuando la superficie ofrece poco más que hielo pulido.
Las mediciones recogidas no solo confirman la fiabilidad de la batería de alto voltaje y la nueva transmisión en frío extremo, sino que garantizan que el futuro propietario podrá disfrutar de todo el rendimiento del coche en cualquier clima del planeta.
Un invierno bien aprovechado
McLaren Automotive cerró a principios de 2025 el capítulo más gélido de la validación del W1, su próximo hiperauto híbrido de la gama Ultimate Series. Durante varias semanas, varios prototipos rodaron sobre lagos helados y pistas de nieve dentro del Círculo Polar Ártico, completando la homologación de todos los sistemas críticos en temperaturas constantemente bajo cero.
Electrónica afinada sobre hielo
El objetivo principal fue ajustar la dinámica en superficies de ultra-bajo agarre: chasis activo, control de tracción, vectorización de par y un nuevo programa electrónico de estabilidad (ESP). Para los ingenieros, deslizar el coche sobre hielo es la forma más rápida de encontrar el punto exacto en el que las asistencias corrigen sin restar emoción; las largas derrapadas que dejaron los W1 sobre la pista ártica lo confirman.
1.258 HP que no conocen el frío
El W1 es el McLaren de calle más poderoso jamás creado. Su tren motriz híbrido combina un nuevo V8 biturbo “MHP-V8” con motores eléctricos para entregar 1.258 hp y 1.340 Nm. En el hielo, esa fuerza bruta sirvió para comprobar que la gestión de par es capaz de dosificar la potencia incluso cuando las ruedas apenas encuentran adherencia.
Batería y transmisión, al límite
Las jornadas incluyeron arranques en frío extremos, aceleraciones sostenidas y frenadas repetidas para someter a estrés la batería de alto voltaje, la nueva transmisión y el propio V8. Según McLaren, los datos confirman que todos los componentes mantuvieron rendimiento y durabilidad a temperaturas que habrían detenido a la mayoría de los deportivos convencionales.
RWD, neumáticos de invierno y diversión controlada
A diferencia de otros hiperautos híbridos, el W1 canaliza su potencia solo al eje trasero. Para lograrlo sin comprometer la seguridad, el equipo recurrió a los nuevos Pirelli P Zero Winter 2, desarrollados en dimensiones específicas para el modelo. La configuración permite a los propietarios conducir todo el año con un simple cambio de neumáticos, sin necesidad de montar un segundo juego de rines.
Transparencia poco habitual
McLaren suele mantener en secreto este tipo de pruebas, pero en esta ocasión compartió imágenes y un video “detrás de cámaras” en su web y redes sociales como adelanto de la fase final de desarrollo antes de la producción.
Con la campaña invernal superada, el programa de validación pasa ahora a circuitos de alta velocidad y ensayos de climas cálidos, pasos previos al debut oficial del W1 previsto para finales de año.
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