El sufragismo en los carteles, la lucha por el voto femenino
Desde principios del siglo XIX grupos de mujeres empezaron a reivindicar un derecho fundamental: el sufragio femenino. Sin embargo, el movimiento feminista, prácticamente recién nacido, todavía no tenía la fuerza suficiente como para que la sociedad lo tomara en serio. Por ello, las sufragistas tuvieron que hacer acopio de toda su tenacidad y firmeza hasta poder ver los frutos de su lucha.
Treinta años más tarde de que se discutiera por primera vez en un parlamento la petición de una mujer que argumentaba que si ella pagaba los mismos impuestos que un hombre también debería poder votar, el movimiento sufragista había progresado mucho. En 1860, las asociaciones que defendían el voto femenino se habían multiplicado, e incluso algunos hombres empezaban a apoyar esta causa.
Hubo también víctimas mortales, como Emily W. Davison, atropellada por una caballo durante una protesta en una carrera
A medida que se acercaba el siglo XX las posibilidades de lograr su objetivo parecían más cercanas, pero tuvieron que enfrentarse a graves prejuicios así como a sus propias divisiones internas. Hubo también víctimas mortales, como Emily W. Davison, atropellada por una caballo durante una protesta en una carrera. Muchas fueron encarceladas, agredidas o alimentadas forzosamente cuando se declaraban en huelga de hambre. Otra medida no tan drástica pero también orientada a convencer a la opinión pública fue la creación de carteles de todo tipo que acompañaban a las sufragistas en sus campañas.
A finales del siglo XIX, en 1893, Nueva Zelanda se convirtió en el primer país del mundo en aprobar el sufragio femenino, y con la llegada del siglo XX le siguieron Australia, Finlandia o Rusia. Y poco a poco el resto de países.
A pesar de que muchas de la sufragistas no lograron ver culminada su lucha, se estaban logrando los grandes objetivos por los que muchas llevaban luchando casi un siglo. Desgraciadamente, es una lucha que todavía hoy continúa librándose en algunas partes del mundo.