Empecemos definiendo que es Marketing. Para Philip Kotler, gurú en el tema, el marketing es «un proceso social y administrativo mediante el cual grupos e individuos obtienen lo que necesitan y desean a través de generar, ofrecer e intercambiar productos de valor con sus semejantes». De esta definición, un poco técnica, podemos resaltar 3 características:
- Intervienen en el proceso dos partes, ya sean grupos o individuos.
- Ambas partes tienen deseos o necesidades para satisfacer.
- Se genera un intercambio de oferta y demanda que satisface las necesidades de ambos.
Ahora bien, ¿qué es Marketing Educativo?
Podemos definir este concepto como el proceso de intercambio de servicios educativos entre instituciones y sus usuarios. En este proceso, las instituciones educativas deben establecer estrategias que les permitan retener y captar alumnos, ofrecer un servicio que agregue valor a sus estudiantes y sostenerse a futuro.
El Marketing Educativo está enfocado a colegios, universidades y centros de educación. Esta herramienta les permitirá a las instituciones realizar un diagnóstico de su situación actual, conocer cuáles son sus fortalezas y debilidades, conocer su competencia y entorno y a partir de ahí, diseñar estrategias que les permitan retener el alumnado y atraer nuevos estudiantes, respondiendo a exigencias externas de ley y contexto.
Esta reciente tendencia del marketing, les permite a las instituciones educativas gestionar la calidad de su propuesta educativa de una manera más holística, donde no solo es importante el servicio a entregar (educación), también es necesario ofrecer una atención eficiente sobre el portafolio de servicios antes de adquirirlo, durante cualquier situación presentada en la prestación del servicio y después de esta, buscando la fidelización de sus estudiantes y familias.
También debemos tener en cuenta que el marketing educativo les ayuda a las instituciones educativas a definir su público objetivo, de manera organizada y precisa les aporta en la segmentación del público al cual quieren dirigirse, definiendo diferentes aspectos como su ubicación, tamaño, edad, composición familiar, aspiraciones, entre otros.
Cuando hablamos de marketing, en ocasiones pensamos en beneficios económicos únicamente, sin embargo, el marketing educativo, va más allá, pues realiza investigación social y reconoce la importancia de generar propuestas de valor que le permitan a los usuarios del servicio potenciar sus capacidades y cumplir sus sueños de formación. Debido a esto, es importante conocer el contexto del público objetivo de la institución, logrando generar una oferta educativa que responda a sus necesidades, posicione la institución como una opción diferente de educación y le permita captar la cantidad de estudiantes esperados.
Si bien el Marketing Educativo está tomando fuerza desde hace unos pocos años, no se debe desconocer su importancia, ya que el sector educativo tiene un alto grado de competitividad actualmente y ha disminuido la natalidad a nivel mundial, lo que también reduce la demanda de servicios educativos, por lo que las instituciones necesitan ser reconocidas entre su público objetivo y lograr la tasa de retención y captación de alumnos que les permitirá sostenerse a futuro.