Sony acaba de anunciar hace unos minutos desde Nueva York su nueva RX10 IV, la cuarta versión de su cámara “todo en uno”, que mantiene el zoom 24-600 de su predecesora pero con el acento puesto en la velocidad gracias a la última versión de su sensor stacked de 1″.
Desde que la primera versión de la superzoom RX10 llegara al mercado, hace ya casi 4 años, la resolución del sensor se ha mantenido invariable en los 20 Mpx, pero a lo largo de sus diferentes revisiones, Sony ha ido introduciendo importantes mejoras en su rendimiento, sobre todo en lo que se refiere a la velocidad. Ya en el anterior modelo –la RX10 III–, presentada en marzo del año pasado, Sony introdujo su sensor CMOS Exmor RS stacked con front-end LSI, que incluía una capa de memoria que permitía incrementar significativamente la capacidad de procesamiento.
Ahora, Sony se ha decantado por la última versión de este sensor, que en combinación con el procesador de imagen Bionz X permite ofrecer unas cifras hablan por sí solas. En efecto, la compañía asegura que la Sony RX10 IV cuenta con el sistema de autoenfoque más rápido del mercado, con un tiempo de AF de tan solo 0,03 s. Es, además, la primera RX10 en incluir píxeles de detección de fase –PDAF– en el sensor.
Asimismo, las ráfagas alcanzar los 24 fps a máxima resolución con AF/AE activos –contra 14 fps en el modelo anterior–, y dispone de un buffer de memoria que puede almacenar hasta 249 imágenes. Un total de 315 puntos de AF permiten cubrir aproximadamente el 65% del fotograma. Por supuesto, cuenta con el obturador electrónico hasta 1/32.000 s con sistema de anti-distorsión para minimizar el efecto de rolling shutter, algo que se consigue gracias a la capa de memoria DRAM “apilada” en el sensor, que permite grandes velocidades de lecturas.
En cuanto a la óptica, Sony sigue apostando por el objetivo zoom 24-600 mm f/2,4-4 que ya introdujo en la RX10 III, cuyo imponente tamaño permite albergar hasta tres anillos en su barrilete, para controlar de forma independiente la apertura del diafragma, la distancia focal y punto de enfoque. La distancia mínima de enfoque de 72 cm y el factor de reproducción es de 0,49x. También dispone de estabilización óptica, con aprox. 4,5 pasos de compensación.
La pantalla táctil abatible de 3″ dispone ahora de una resolución ligeramente superior –1,44 contra 1,23 millones de puntos– e incorpora ahora las funciones Touch AF y Touch Pad, por primera vez en la serie RX. La ergonomía también ha sido mejorada en algunos aspectos, ya ahora disponemos de la funcionalidad “My Menu” que permite configurar los accesos más utilizados. Por supuesto, sigue contando también con el visor electrónico OLED de 2,35 millones de puntos de resolución –cuya latencia ha sido también mejorada gracias al incremento de velocidad de la cámara–, y con la pequeña pantalla LCD del panel superior.
El resto de características son similares a las que ya encontrábamos en la RX10 III, con capacidad de grabación de vídeo 4K con lectura completa del sensor –es decir, sin pixel binning– en 30p o 24p –con tasas de hasta 100 Mbps–, aunque ahora hace uso de los píxeles PDAF del sensor algo que, como ha recordado Sony durante la conferencia de presentación de la RX10 IV, muy pocas cámaras hacen. Encontramos también un modo slow motion de hasta 1.000 fps, y las conectividades inalámbricas Wi-Fi, Bluetooth y NFC.
La Sony RX10 IV estará disponible el próximo mes de octubre a un precio estimado de 2.000 €, un precio de salida significativamente superior al de la Sony RX10 III en su momento.
Más información en la nota de prensa oficial y en la página de producto de la Sony RX10 IV.