La multinacional surcoreana anuncia su tercera generación de discos duros portátiles SSD, los Samsung T5, que se caracterizan por su tamaño compacto y altas velocidades de transferencia.
Gracias a la robustez asociada a los discos de estado sólido, que no disponen de partes móviles como los discos duros tradicionales, estos discos SSD son especialmente indicados para aquellos fotógrafos –y demás usuarios– que desean llevar consigo grandes cantidades de datos de un lado a otro. Además, sus altas velocidades de transferencia permiten utilizarlo como disco externo alternativo para el uso de aplicaciones exigentes, e incluso editar vídeo 4K en formato RAW.
De forma similar al modelo precedente, el Samsung T3, los nuevos discos adoptan un puerto de tipo USB-C, pero ahora apuestan por el norma USB 3.1 Gen 2, con una ancho de banda teórico de 10 Gbps, dos veces más grande al de la anterior generación –USB 3.1 Gen 1–. Gracias a este puerto, cada vez más común en ordenadores portátiles y terminales móviles, es posible conectarlo a algunos de los últimos smartphones de la compañía sin necesidad de adaptadores, como el Samsung Galaxy S8.
El Samsung T5 apuesta esta vez por la memoria V-NAND de 64 capas propia de la compañía, la cuarta generación de este tipo, y que permite alcanzar velocidades de transferencia secuenciales de hasta 540 MB/s, contra los 450 MB/s del modelo que sustituye.
Sus dimensiones de 74 x 58 x 10,5 mm y su peso de 51 g son idénticos a los de la generación anterior, pero su acabado exterior metálico en aluminio se ofrece ahora en dos colores –negro y azul–, dependiendo del modelo.
El Samsung T5 está disponible a partir de 130 $ –impuestos no incluidos– para la versión más pequeña de 250 GB de capacidad, mientras que los precios de las versiones de 500 GB, 1 TB y 2 TB son de 200 $, 400 $ y 800 $, respectivamente.
Más información en la nota de prensa oficial y en la página de producto del Samsung T5.