Red Hat está de cumpleaños. La empresa que fue fundada en 1993 se ha convertido en uno de los mejores ejemplos de cómo trabajar con software open source puede ser no solo rentable, sino un negocio multimillonario. La empresa que comenzó vendiendo diskettes, para el año 2009 tenía ingresos de más de 650 millones de dólares. En 2017 ingresaron más de 2.400 millones en todo el mundo.
La compañía ofrece varios sistemas operativos, como el famoso Red Hat Linux, servicios de virtualización, gestión, soluciones en la nube, tecnologías de almacenamiento y más. Son socios de empresas como IBM y Dell, y algunos de sus clientes incluyen empresas como Qualcomm y hasta el CERN. Y todo comenzó en el cuarto de costura de la esposa de Bob Young hace 25 años.
Young, fundador de la empresa, y Jim Whitehurst, actual CEO de Red Hat, hablaron con ZDNet sobre el camino que han recorrido durante un cuarto de siglo para llegar a ser quizás la empresa de software Linux y open source más exitosa hasta la fecha.
La versatilidad de Linux y su filosofía de colaboración
Young explica cómo en aquel entonces Solaris, el sistema basado en Unix, era mucho mejor que Linux, y que aunque no podía vender Linux como mejor, más rápido o con más funciones, podía enfocarse en un único beneficio: los usuarios podrían ajustarlo para satisfacer sus necesidades. Un punto clave de venta que sigue manteniéndose hasta el día de hoy, y que todo fan de Linux abraza.
Lo que más ama Bob Young de la historia es cómo hicieron falta muchos contribuyentes de las diferentes comunidades de software libre y open source, como Richard Stallman y Linus Torvalds para poder cambiar de forma fundamental la forma en la que el software es desarrollado. Ninguno podría haberlo hecho sin los demás.
Red Hat es el segundo contribuyente corporativo más grande del kernel de Linux, solo después de Intel. Sistemas operativos como Red Hat Linux son de código abierto, pero la empresa lo comercializa vendiendo su soporte de primera adaptando el sistema a cada cliente y solucionando sus problemas.
Otro que forma parte del sistema de retroalimentación de Red Hat es Fedora. El proyecto es independiente pero se beneficia del feedback y patrocinio de Red Hat, al miso tiempo que la empresa se beneficia de la colaboración con toda la comunidad.
Red Hat es un excelente ejemplo de como la colaboración y el desarrollo abierto pueden ser beneficiosos tanto para las comunidades como para empresas, y como Linux y su filosofía colaborativa son la base de todo.
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