Desplaza a Samsung como líder en capacidad, pero no en velocidad.
Los SSD están alcanzando capacidades de almacenamiento realmente increíbles, sobrepasando prácticamente cualquier uso que una persona estándar pueda necesitar durante su día a día. Si hace un mes era Samsung la que sacaba pecho con su PM1643 y los 30,72 TB que incorporaba, ahora es Nimbus Data quien quiere sentar cátedra con una unidad de nada menos que 100 TB.
El ExaDrive DC100, para hacerse una idea, puede almacenar cerca de 20.000 películas en calidad HD, lo cual se puede considerar un más que decente archivo videográfico. Por supuesto, este SSD no está destinado a ser utilizado por el consumidor medio, sino por empresas, por lo que es más que probable que nunca veas a tu vecino con uno de estos discos pirateando películas o canciones como si le fuera la vida en ello.
Cantidad, no velocidad
Este SSD está pensado para que el almacenamiento sea su principal característica (como ya denotan los mencionados 100 TB), lo cual viene con un sacrifico en términos de velocidad de lectura y escritura. Mientras que el mencionado terminal de Samsung ronda los 2.000 MB/s, este se queda en apenas 500 MB por segundo, lo cual acentúa esa sensación de singularidad.
Nimbus Data launches the world’s largest solid state drive
– 100 TB – to power data-driven innovation. #MayTheFlashBeWithYou https://t.co/FXVDjhFKq3 pic.twitter.com/iyQ4WA6H6r— Nimbus Data (@NimbusData) March 19, 2018
Otro de los aspectos que destacan desde Nimbus Data es la fiabilidad de estas unidades, que ofrecen un tiempo medio de fallo de 2.500 millones de horas de funcionamiento. Además de esto, la eficiencia es otro de los puntos fuertes del ExaDrive DC100, que es capaz de obtener un consumo por TB un 85 por ciento inferior a los competidores. El conjunto de innovaciones del producto, según la empresa, supondrán a los clientes un ahorro del 42%/TB en un periodo de 5 años.
Nimbus Data ha anunciado que también habrá una versión de 50 TB y que ambas comenzarán a comercializarse durante este verano, teniendo encargos de empresas como PayPal, Disney o eBay. Se desconoce cuál será su precio final, pero las estimaciones se sitúan en varias decenas de miles de dólares.