Decir adiós a los cables es una declaración de intenciones. El futuro al que nos aproximamos se dirige a través de una sociedad hiperconectada, escenario de objetos electrónicos parlantes entre sí. Apostar por un entorno inalámbrico es un gran desafío como atestigua el reciente anuncio del consorcio Bluetooth Special Interest Group (SIG), organización que supervisa el desarrollo de esta norma de conectividad inalámbrica, que ha adelantado algunas de las características que estarán presentes en Bluetooth 5.0, la actualización de este protoloco que posibilita la transmisión de voz y datos entre diferentes dispositivos mediante un enlace por radiofrecuencia.
El reto es hacer frente, precisamente, a esta demanda cada vez mayor y que ha empezado a ceder el testigo a las conexiones basadas en la red Wifi (y posiblemente en riesgo ante el método denominado LiFi) o incluso NFC. Y, para ello, potenciará su rendimiento y eliminará uno de los aspectos más frustrantes de esta tecnología, su limitado alcance.
Con lo cual han decidido ponerse al día para mejorar el estándar de cara a incrementar significativamente sus funciones relativas a radio de alcance y transmisión de datos, por lo que se promete una mejora en el consumo de energía, evitando un consumo excesivo de batería. La nueva versión de Bluetooth, que estará disponible a final de año o principio de 2017, duplicará la velocidad y aumentará la capacidad hasta en un 800% en comparación con el diseño actual, la versión Bluetooth 4.2.
El potencial de esta herramienta de comunicación inalámbrica, convertida en indispensable para muchos aparatos, permitirá extender la era de los dispositivos conectados («Internet de las Cosas») facilitando la construcción de un entorno libre en el hogar. Actualmente, es un problema habitual que las conexiones inalámbricas mediante este protocolo están limitadas a un radio de alcance muy escaso, de tan solo unos pocos metros, por lo que se da el caso que, por ejemplo, desde otra habitación el usuario no puede controlar o acceder a un dispositivo como un altavoz portátil o un reloj inteligente.
La alta velocidad de Bluetooth 5.0 permitirá enviar datos de manera más rápida con la consabida optimización de la capacidad de respuesta y anticipará, así, una nueva generación de servicios «sin conexión», tales como información derivada de la ubicación o la navegación. Esta visión va a redefinir la forma en que los dispositivos con conexión Bluetooth transmiten información, alejándose del modelo de «aplicación sincronizada a un dispositivo».
A diferencia del diseño actual, que soporta teóricamente transferencias de datos de 24 Mbps, el próximo modelo alcanzará 100 Mbps y será capaz de conectar dispositivos que se encuentren en un radio de hasta 200 metros, aunque se desconocen todavía algunos aspectos relacionados con su seguridad informática. Para los responsables, Bluetooth 5.0 «transformará la forma en que las personas experimentan el ‘Internet de las Cosas’ de forma sencilla y sin problemas», explica en un comunicado Mark Powell, director de Bluetooth SIG.
Actualmente se estima que hay unos 8.200 millones de dispositivos (auriculares, altavoces, teléfonos inteligentes) con esta característica en funcionamiento y se espera que para 2020 los aparatos con Bluetooth sumen un tercio de todos los dispositivos del «Internet de las Cosas», una concepción de la tecnología que pretende que los aparatos electrónicos mejores sus prestaciones gracias a su conexión a internet.
fuente: abc.es