El futuro de la publicidad apunta directo a lo predictivo: frente a los viejos tiempos en los que las campañas se basaban en la segmentación de audiencias con datos estáticos o el análisis de acciones previas, la irrupción de la inteligencia artificial en la publicidad digital permite ya detectar automáticamente a gran escala patrones de comportamiento y ajustar los anuncios a las necesidades también futuras de cada consumidor. En muy poco tiempo, esta prometedora tecnología todavía incipiente ha cambiado drásticamente el modo en el que los especialistas en marketing conectan y se relacionan con éxito con sus audiencias de forma personalizada, según destaca Juan Sevillano, director general para España de Sizmek, en un reciente informe de esta plataforma líder en gestión publicitaria a nivel mundial vinculada a más de 20.000 anunciantes y más de 3.500 agencias.
La inteligencia artificial es actualmente «la herramienta de marketing más poderosa», precisa, porque atribuye en un milisegundo la mejor ubicación para un anuncio entre 300.000 millones de posibles impresiones diarias o impactos publicitarios. Entre sus grandes beneficios el documento destaca los siguientes:
Permite analizar ingentes cantidades de datos
La inteligencia artificial analiza volúmenes de datos inabarcables para el cerebro humano en términos de cantidad y velocidad de procesamiento, con el objetivo de ajustar automáticamente los anuncios a las necesidades particulares de cada consumidor dependiendo del momento y lugar particulares.
Eso permite a la industria publicitaria aumentar la rentabilidad de sus campañas, fijar mejor sus estrategias tras alcanzar de lleno a los consumidores y aumentar el retorno de la inversión del gasto publicitario.
Dota de más «inteligencia» a los profesionales del marketing
Actualmente las marcas, los anunciantes y las agencias de medios están mejor equipados que nunca para comprender a sus consumidores gracias a la tecnología. Plataformas de inteligencia artificial como la de Sizmek identifican automáticamente qué anuncio es el más recomendable en un momento dado para un consumidor concreto y determinan en tiempo real dónde mostrarlo para mejorar la rentabilidad de las campañas.
Mejora el conocimiento del cliente
La inteligencia artificial desvela patrones relevantes del comportamiento del usuario, lo que permite ajustar en tiempo real los anuncios a necesidades determinadas. «Ahora podemos identificar los elementos que funcionarán incluso antes de lanzar la campaña. Esto es un gran hito para la programática y la publicidad en general», precisa Juan Sevillano.
La inteligencia artificial desvela información «muy valiosa» sobre qué factores animarán en un momento dado al consumidor a formalizar una determinada compra, mientras que hasta ahora el anunciante se limitaba al uso de parámetros estáticos no siempre actualizados para definir perfiles sin llegar a conocerse profundamente al consumidor como sí es posible ahora.
Aumenta la «inteligencia» del negocio publicitario
Aquellos profesionales que dirigen negocios, departamentos de marketing y campañas publicitarias están mejor informados ahora sobre las necesidades de los consumidores y el funcionamiento de sus campañas con el uso de inteligencia artificial. Esta herramienta que transformará la forma de trabajar en esta industria ha cambiado por completo el método en el que el sector aprende del cliente digital para llegar hasta él.
Amplía las capacidades de los publicistas
La inteligencia artificial extiende también al ámbito científico las capacidades del publicista más allá de las creativas, para mejorar el conocimiento que tiene de su público. Esta tecnología le ayuda a desempeñar funciones asimismo vinculadas con la gestión de datos, la transformación digital y la dirección estratégica.
En definitiva, la llegada del revolucionario frente tecnológico que es la inteligencia artificial ha desencadenado una profunda transformación, tras décadas en las que la industria publicitaria se había basado para el diseño de sus campañas en la segmentación de audiencias a partir de datos estáticos y a veces obsoletos. El auge de plataformas punteras dará paso a una nueva era de generalización de estas nuevas tecnologías que identifican y procesan al instante millones de datos en internet y cuyo análisis desvela información hasta ahora inescrutable sobre cada consumidor.