Esta colorida imagen muestra el ?espectro del destello’ de la cromosfera del Sol. Fue capturada durante el eclipse total que se produjo a lo largo de los Estados Unidos el 21 de agosto de 2017, por la expedición de la ESA que monitorizó el proceso desde Casper, en Wyoming.
Durante un eclipse, cuando la Luna oscurece temporalmente la desbordante luz de la fotosfera solar, los astrónomos pueden realizar mediciones únicas. Un ejemplo de ello es el halo rojo normalmente invisible de la cromosfera, es decir, la capa de la atmósfera solar situada encima de la turbulenta superficie de la fotosfera.
La imagen que observamos solo se puede obtener con la última y la primera luz de lo que se conoce como el limbo solar —los momentos que tienen lugar justo antes y después de la totalidad del eclipse—, por lo que a esta medición se le ha dado el nombre del "espectro del destello‘, ya que debe realizarse en cuestión de segundos.
En ese momento, la emisión de luz del Sol puede dividirse en un espectro de colores que muestra las huellas de distintos elementos químicos.
El espectro del destello aquí mostrado se produjo con el primer limbo solar observable tras la totalidad. A la derecha podemos observar una imagen del Sol eclipsado mientras que a la izquierda de muestra el espectro capturado en distintos momentos en los que la Luna ocultaba el Sol mientras se producía el eclipse.
La emisión más potente se debe al hidrógeno. En ella se incluye la emisión de hidrógeno-alfa representada en color rojo en el extremo derecho de la imagen y de color azul y violeta en el izquierdo. Entre medias, el amarillo brillante corresponde a la emisión del helio, un elemento descubierto en un espectro de destello capturado durante el eclipse total del 18 de agosto de 1868, aunque en aquel momento no se supo de qué se trataba. Casi tres décadas después, el elemento se descubrió en la Tierra y hoy en día se sabe que es el segundo elemento más abundante del Universo después del hidrógeno.