Numerosos objetos y restos de tumbas de la época grecorromana han salido a la luz durante unas excavaciones arqueológicas en el sitio de Al-Abd, ubicado en la zona este del cementerio helenístico de la antigua ciudad de Alejandría, según informó ayer el Ministerio de Antigüedades de Egipto. La misión arqueológica egipcia que trabaja en Al-Abd ha hallado una colección de vasos depositados a modo de ofrenda, lámparas decoradas con escenas de deidades y, el hallazgo más importante, una lápida que fue utilizada antiguamente para sellar uno de los pozos funerarios.
La lápida grecorromana es una evolución de la idea de las puertas imaginarias
La lápida contiene unas decoraciones e inscripciones realizadas con una mezcla de cal y arena en un fondo liso que representa la fachada de un antiguo templo de estilo egipcio: una escalera conduce a la entrada, flanqueada por dos columnas. Representa una puerta de doble hoja: una cerrada y la otra entreabierta, coronada por una decoración formada por un disco solar alado. Ibrahim Metwaly, el director de las excavaciones, ha explicado que la lápida es una evolución de la idea de las puertas imaginarias, difundida durante el Antiguo Egipto con el objetivo de confundir a los ladrones o saqueadores de tumbas y alejarlos de la verdadera puerta de la tumba.