Uno de los anuncios de la Super Bowl, la pausa publicitaria del año en Estados Unidos y la que sirve fuera de ese país para ver tendencias en publicidad, pero también en lo que se anuncia, estará protagonizado por Alexa, el asistente de hogar de Amazon. En el anuncio, del que por ahora Amazon solo ha lanzado un teaser, se adelanta que en la historia Alexa perderá su voz.
Que Alexa protagonice el anuncio no es solo una curiosidad en el terreno publicitario y spam de Amazon, sino también un síntoma de cómo están cambiando las cosas. Los asistentes de voz para el hogar están empezando a dejar de ser una curiosidad tecnológica y están entrando en el terreno de lo ‘mainstream’, de lo que los consumidores quieren y buscan en el mercado. Aparecer en la pausa publicitaria de la Super Bowl implica entrar a conquistar un mercado todavía más millonario.
Amazon y su Alexa son quienes tienen un mayor peso en el mercado (al menos en cifras de EEUU, donde se está desarrollando esta batalla y desde donde llegará al resto del mundo en un futuro que se puede imaginar será inmediato), pero no son las únicas que están intentando posicionarse. Google, por ejemplo, también cuenta con su propio asistente, Google Home, y la lista irá creciendo a medida que el mercado se vaya volviendo más competitivo.
Y si el mercado se vuelve más competitivo, además, también empezará a convertirse en un elemento de atracción para los anunciantes, que empezarán a ver en estos dispositivos una potencial vía para llegar a los consumidores y una, además, en la que tendrán una oportunidad diferente para posicionar su publicidad.
De hecho, algunos expertos ya hablan de estos asistentes como de la cuarta dimensión o la cuarta pantalla publicitaria. Tras la tercera pantalla (el móvil y la pantalla del tablet) la cuarta pantalla – la próxima palabra de moda para algunos expertos – será la de todo aquello que se ha convertido, como especula un experto en Recode, en un asistente, desde el coche que interactúa con el usuario a las asistentes del hogar.
Por qué no deben quedar fuera del radar
Y ahí es donde se ve la nueva y la más factible oportunidad, ya que las tasas de crecimiento (siempre con números de EEUU) en el uso de estos terminales son ya muy elevadas (un 128% en un año) y su éxito en la pasada temporada de Navidad fue bastante notable.
Por ello, los asistentes de voz no pueden quedar fuera del radar de las marcas y no pueden ser perdidos de vista por los expertos publicitarios. Los marketeros ya empiezan a tomar nota de su existencia y a plantearse cómo aprovecharlos. Que sean asistentes de voz y que funcionen con audio no debería, eso sí, hacer pensar que con lanzar una publicidad ‘a lo radio’ ya se tienen hechos los deberes. Lo cierto es que se necesita ser muy creativo y se necesita integrarlo muy bien en el contenido que están recibiendo a través de estos asistentes.
Además, de entrada, muchos de ellos no usan publicidad, lo que hace que las marcas y empresas tengan que ser más creativas a la hora de posicionarse en ellos. Los anuncios no serán la vía a emplear, sino más bien habrá que trabajar en una estrategia de marketing de contenidos o una de búsquedas. En vez de hacer SEO para un buscador tradicional, habrá que hacerlo para el asistente de voz de turno. Las estrategias de marketing deben, por tanto, adecuarse a un nuevo escenario.