En nuestro anterior artículo iniciamos el recuento de novedades –en el apartado de cámaras– con la ARRI ALEXA SXT W y su emisor inalámbrico integrado. Pero la nueva cámara es apenas una parte de la estrategia del fabricante germano con respecto a su Sistema de Vídeo Inalámbrico (WVS).
Dicho sistema consta de un transmisor independiente –Wireless Video Transmitter: WVT-1– que se puede usar con otras cámaras de ARRI o con modelos de terceros. También incluye un receptor de vídeo –Wireless Video Receiver: WVR-1– que funciona tanto con el transmisor WVT-1 como con el integrado en la ALEXA SXT W. La tecnología del sistema ha sido desarrollada por una de las empresas líderes del mercado: Amimon. No obstante, han sido necesarias numerosas modificaciones de hardware y software para cumplir con las rigurosas condiciones de rendimiento y calidad que exigió ARRI.
El equipo responsable de accesorios de la marca se ha mantenido ocupado construyendo una gama extensa de soportes de montura, extensiones de antenas y un estativo de soporte para el monitor del director –Director’s Monitor Support: DMS-1–. También se ha desarrollado un monitor de Transvideo especialmente adaptado, con un receptor integrado para los transmisores de ARRI. Es, por tanto, un sistema modular y flexible. Una salida extra de potencia en el receptor de vídeo posibilita que -tanto el mentado receptor, como el monitor acoplado para usar en mano- funcionen a partir de una única batería en el estativo.
Cada uno de los componentes del WVS está fabricado a prueba de rociaduras y polvo, con materiales robustos, cobertores de protección en los conectores y capacidad para trabajar en un amplio rango de temperaturas.
El monitor de Transvideo “Starlite WVS” es un panel OLED de 5″, válido para recibir la señal del WVT-1 o de la ALEXA SXT W, pero no funciona con el transmisor TitanHD2 TX de la propia Transvideo. Para ello resultaría necesario emplear el monitor/receptor Transvideo StarliteRF-A. También consta de un panel OLED de 5″, pantalla táctil y un receptor inalámbrico integrado que permite controlar las funciones de cámara en las ARRI ALEXA Mini y AMIRA. Se puede montar en controladores remotos como el ARRI WCU-4, un Preston, un cmotion u otros muchos para obtener una visualización nítida y brillante por parte del foquista.
El StarliteRF-A opera en la banda ISM de 5,8 GHz. Si se emplea el transmisor TitanHD2 TX, es posible recibir la señal sin latencia a 200 m hasta en cinco monitores simultáneamente. La unidad de transmisión usa un Lemo de 5 pines para acoplar en el conector EXT de la cámara.
S.U.P. 5 para ARRI ALEXA Mini
El paquete de actualización de software (S.U.P.) 5 para la ARRI ALEXA Mini incluye toda otra serie de novedades.
Quizá la más llamativa sea la amplia biblioteca de looks predefinidos para las cámaras del fabricante muniqués, con control avanzado de aspecto. Está disponible para todas las ALEXA Mini y AMIRA.
Las denominaciones para describir los looks incluyen nombres de estaciones del año, emulaciones de emulsiones fotoquímicas, localizaciones –ciudades y suburbios–, décadas –desde los años 20 a los 90 del siglo pasado–, tendencias de moda y belleza, los ya tradicionales bleach bypass, procesados cruzados y vídeo. En total hay 87 looks, que pueden verse –en la correspondiente app para iOS– aplicados a tres tipos de escenas distintas: una con el rostro de una modelo, otra con la imagen de un automóvil deportivo de Honda y otra de la esquina de las calles Hollywood y Vine frente al conocido restaurante Katsuya.
Esta biblioteca básicamente incorpora la previsualización –y el ajuste de color típico de postproducción– a la propia cámara, con muchas de las permutaciones que se han utilizado con anterioridad en emulsiones fotoquímicas y laboratorios de todo el mundo. Algunos profesionales se han apresurado a calificarla como “el Instagram de ARRI”, pero no deja de ser una opción más y una referencia que no necesariamente condiciona el aspecto final de nuestros proyectos.
Los looks pueden utilizarse como meros metadatos y facilitar el trabajo de los DIT, ahorrándoles tiempo a la hora de generar dailies y enviar imágenes de ejemplo al departamento de postproducción.
También pueden suponer una herramienta importante en el set de rodaje –para la visualización por parte del director y otros miembros del equipo– en la video-village. Se puede adquirir la licencia por un coste modesto y todas las nuevas ALEXA Mini la traerán ya incorporada.
Otras novedades de la S.U.P. 5 incluyen:
- Desanamorfización 1.3x de la imagen en el visor electrónico y en las salidas SDI
- Un Protocolo de Acceso a Cámara (CAP), que permite controlar la cámara y el aspecto de la imagen por medio de un cable Ethernet y por Wi-Fi, con software de color como el Pomfort LiveGrade Air.
- Controles de reproducción de cámara y de configuraciones de usuario desde el ARRI WCU-4.
- Configuración de la reproducción y de las elecciones del usuario para el monitor táctil Transvideo Starlite HD5-ARRI.
- Configuración de códigos de tiempo y fase en modo Jam Sync, de manera que la cámara puede permanecer en perfecta sincronía con la señal de una fuente hasta 8 horas.
- Funcionamiento constante del reloj interno del código de tiempo durante la filmación de escenas a velocidades de fotogramas por segundo no estandarizadas o que no se corresponden con la general del proyecto.
- Ampliación del soporte para ópticas con montura Canon EF, incorporando potencia para la estabilización óptica de imagen (OIS) y control de los anillos de enfoque y apertura de diafragma para las empuñaduras inteligentes ARRI Master Grip.
- Posibilidad de realizar capturas de fotograma durante los procesos de filmación y/o reproducción.
Configuración de estudio para la ARRI ALEXA Mini
Han pasado ya dos años desde la presentación de este modelo en el NAB Show de 2015. La idea original de ARRI era que sirviera para emplearse como “cámara B”, específica para rodar en dones, cardanes y grúas, en compañía de la ALEXA SXT. Pero tanto numerosos directores de fotografía como responsables de producción no han dudado en usarla con muy diferentes propósitos. En ocasiones, por motivaciones artísticas y en otras por límites presupuestarios.
La idea de que la ALEXA Mini es más cómoda que una SXT para un operador en cualquier situación –con el añadido de numerosos accesorios de terceros– ha demostrado ser muy discutible, pero cualquiera le quita ahora esa premisa de la cabeza a los directores de producción, así que nos vemos abocados a rodar de todo con la ALEXA Mini, tanto en nuestras pequeñas industrias como en Hollywood. La calidad de algunos de los accesorios de terceros ha resultado ser nefasta y no es la primera vez que se caen a trozos en mitad de una escena.
A la vista de los hechos, el equipo de ARRI PCA ha desarrollado su propio conjunto de elementos para configurar de forma versátil esta cámara para su uso en estudio. Permite cambios muy rápidos y sencillos entre distintas disposiciones de cámara y se adapta a una amplia variedad de usos –al hombro, en trípode, con estabilizadores, en el sistema ARRI Trinity o en SteadyCam–.
En nuestro próximo artículo seguiremos analizando las novedades relativas a cámaras de otros fabricantes.