Aún falta algo más de una semana para que ‘Logan’ llegue a los cines, pero la despedida de Hugh Jackman como Lobezno ya está siendo muy comentada, en parte por el entusiasmo que ha despertado entre la crítica –aquí podréis leer la nuestra, totalmente libre de spoilers-.
En ‘Logan’ también’ volveremos a ver a Patrick Stewart dando vida a Charles Xavier. El actor ha estado hoy en Madrid para presentarla. Por ello hemos podido hablar con él junto a otros medios y a continuación os dejamos el resultado de esa conversación.
- Con todas las veces que ha interpretado al profesor Charles Xavier, ¿qué le llevó a aceptar este, en principio, último viaje para el personaje?
Mi relación con la franquicia ‘X-Men’ es muy personal e íntima. Son muchos años con Lauren Shuler Donner, Bryan Singer y por suerte también con James Mangold. Todo lo que experimenté fue curiosidad y alegría porque volvieran a llamar a mi puerta después de ‘X-Men: Días del futuro pasado’ (‘X-Men: Days of Future Past’), donde aparentemente era devorado por esos monstruos. Parecía el fin, incluso aunque muchos años antes Jean Grey me había volatilizado; una experiencia incómoda.
Pero aquí estamos de nuevo. Cuanto más me hablaban del argumento… Tengo que decir que nunca he sido un consumidor de cómics. Hace diecisiete años ni sabía lo que era X-Men, pero bueno tampoco conocía a Lady Gaga (se ríe). No, eso es mentira, no me hagáis caso. Pero me llegaban detalles de la historia y me interesó. Un Charles Xavier envejecido y peligroso que recibe los cuidados de un Lobezno también venido a menos en algún lugar de la frontera de Texas.
Ese era un lugar que conozco bien, porque había rodado durante un tiempo la película ‘Dune’ en Ciudad Juárez, que fue el título provisional de la película durante un tiempo. Luego dije que sí sin dudarlo ni un segundo, porque tenía muchas ganas de trabajar con James Mangold y porque trabajar de cerca con Hugh Jackman siempre ha sido encantador, es un gran amigo y una buena persona.
Cuando leí el guion, mi primera reacción fue de sorpresa hacia dónde viven y pensé que me apetecía mucho entrar en esa aventura. Y tuve mucha suerte, la primera escena que rodé es mi primera en la película, ese diálogo entre Logan y un Charles medio delirante… Mi agenda de rodaje siguió la evolución de la historia porque tenía un compromiso previo y estuve ocho semanas rodando.
Mi última escena en la película también es mi última secuencia en la película. Íbamos siguiendo el orden cronológico y al final acabamos todos a la una y media de la mañana en Luisiana con ese calor asfixiante que hace. Es muy raro que un actor pueda rodarla así, de forma cronológica.
- En la película Xavier es muy diferente, tanto en lo psicológico como en lo físico, ¿qué indicaciones le dio James Mangold para abordar a un personaje muy diferente a lo que habíamos visto hasta ahora?
Nos conocimos mucho antes de que empezáramos a rodar. Hablamos sobre el origen de su deterioro físico y cómo se iba a mostrar en pantalla. Fue idea suya que tuviera algo de pelo, lo cual me pilló por sorpresa. Recuerdo hablar un poco sobre el estado mental de Charles, porque durante algunos años había leído mucho sobre el Alzheimer y la demencia senil vinculada al envejecimiento, lo que podría pasarme a mí. Actualmente estoy bastante sano (toca la madera de una de las sillas).
Hablamos de la relación con Logan, del cuidado que asume, el rol de enfermero que tiene, y que ejerce como conductor de limusinas para conseguir dinero para cuidar de Xavier y mantenerlo con vida. Luego entra en acción el personaje de Laura y qué papel juega ella en esa relación entre ambos.
Muy pronto en el proceso, James me enseñó la prueba que hizo Dafne Keen. Me quedé anonadado, ya no por ser una niña, sino porque muy muy pocos actores adultos hacen una prueba así. Después de verla le dije a él “¿La has fichado?” Por supuesto que sí.
- Ella es de Madrid.
Sí, su madre es una actriz muy distinguida y yo conozco el trabajo de su padre porque lo he visto. Ella tiene unos genes estupendos.
- Ha trabajado 17 años en esta saga, ¿qué le ha aportado tanto personal como profesionalmente? ¿Cómo es su relación con la gran masa de fans que sigue la saga?
Voy a empezar por la última parte de la pregunta. Yo no tengo relación con los fans para nada más allá de algún encuentro por calle. Una vez acabemos, voy a salir a pasear un par de horas por Madrid… pero no suelo conocer a los fans. Antes sí que iba a estas convenciones de ‘Star Trek’ y creo que en agosto en Las Vegas voy a acudir a una, porque son 30 años del comienzo de ‘Star Trek: La nueva generación’ (‘Star Trek: The Next Generation’).
Hay una convención todos los fines de semana y me sentía mal por haber dicho que no a todas, que esto es importante. Al menos una vez tendríamos que reunirnos todos y pensé que Las Vegas era el lugar ideal. Sí que se solapan, muchos de los fans de ‘Star Trek’ también lo son de ‘X-Men’.
Sin embargo, estos diecisiete años ha sido una relación de ocasiones puntuales, mientras que en ‘Star Trek’ fue durante siete años, cinco días a la semana, cuarenta y siete semanas al año. Eso fue muy diferente, exigía demasiado. Por suerte no hubo ningún problema, pero mucho antes de que llegáramos al final de esos siete años comenté que no podía seguir con un compromiso así, dedicando tanto tiempo a un único personaje cuando mi carrera se ha basado en la diversidad.
Mi primer trabajo a los 19 años fue en una compañía teatral británica en la que hacíamos una obra teatral nueva cada semana. Ensayábamos cinco días, representábamos dos y volvíamos a empezar. Yo tenía papeles pequeños, pero eso me abrió la mente, que siempre había que hacer algo nuevo, distinto. Me enamoró esa forma de trabajar, con un grupo de actores y siempre pensé que ‘Star Trek’ era así, justo lo que yo quería.
Con ‘X-Men’ igual, he amado a todas las personas con las que he trabajado. Gracias a ella conocí a Ian McKellen, un actor del que había sido fan durante muchos años. Teníamos los trailers al lado del otro en Toronto, y en películas así te pasas más tiempo allí que trabajando. Estábamos siempre en su caravana o en la mía. Teníamos mucho de lo que hablar y ahora es como un hermano. De hecho, acabamos de terminar de estar representando durante seis meses una obra en Londres.
Otra relación importante que llegó a mi vida fue con Hugh Jackman. Charles Xavier se siente muy responsable de él, sabe todo lo que ha sufrido en el pasado. Hay incluso una escena en ‘Logan’ en la que le grito “¡Yo te di una familia!”. Trabajar con él y conocerle ha sido una de las grandes alegrías de esta franquicia.
Al respecto sí que ‘X-Men’ ha tenido un impacto en mi vida, y también me ha hecho llegar a más espectadores. Aparte de eso… mi carrera entre las películas de ‘X-Men’ ha sido muy ajetreada y variada. De hecho, en verano estreno una comedia romántica con Glenn Close y John Malkovich, y un poco más tarde seré el emoticono de la caca en ‘The Emoji Movie’.
- Me preguntaba si ha echado en falta que le llamasen de algunas franquicias, por ejemplo para el papel de M en James Bond o para Harry Potter. ¿Le habría gustado participar en alguna?
No estarás sugiriendo que no hubiera sido bueno para el papel de James Bond, ¿verdad? La verdad es que Ian y yo siempre hemos sentido que se nos pasó por alto para las sagas de ‘Harry Potter’ y James Bond. Me siento muy satisfecho con estas dos franquicias exitosas que he tenido en mi carrera, pero quién sabe, a lo mejor ‘The Emoji Movie’ también acaba siéndolo.
- Preguntaba porque había un rumor sobre las siguientes películas de James Bond de que le habían contactado para hacer de M.
¿De verdad? Por favor, diles que estoy disponible e interesado.