La activista Oksana Shachko, una de las fundadoras de Femen, fue hallada muerta el pasado lunes en su piso de París, a la edad de 31 años. Según la versión preliminar que baraja la policía se trataría de un suicido.
En el piso también se encontró una nota, con el texto “Sois todos unos falsos“. Anna Gutsol, otra de las fundadoras del movimiento feminista, informaba del acontecimiento a los medios ucranianos, país de origen de la activista fallecida.
Schacko creó Femen junto con Gutsol y otra amiga suya, Alexandra Shevchenko, hace justo diez años. Detenida y deportada a Ucrania a raíz de la protesta contra Vladímir Putin durante las elecciones presidenciales en Rusia de 2012, obtuvo refugio político en Francia. En 2016 abandonó la organización y se dedicó a la pintura.
El movimiento Femen nace con la idea de reivindicar el feminismo y protestar contra aquellas posturas consideradas machistas; un movimiento que ha sabido utilizar una potente imagen gráfica para llegar al público, en la que sus activistas muestran sus torsos desnudos en topless y sus puños en alto como señas de identidad. La prostitución, las políticas antiabortistas o la Iglesia son algunos de sus frentes de lucha más conocidos, con la máxima de defender a la mujer del patriarcado imperante en la sociedad actual.
Por supuesto, sus acciones no están exentas de polémica, e incluso organizaciones feministas han criticado que la forma de llevar su protesta contiene en sí misma algunos de los elementos contra los que se pretende luchar.
Para profundizar en este movimiento, podemos hacer referencia al libro En el principio era el cuerpo editado por MalPaso, escrito por varias de las integrantes del colectivo, donde podemos encontrar textos narrados en primera persona por sus protagonistas sobre la creación de Femen.
Fuente: eldiario.es