El Kindle Oasis de 2016, el primero de la nueva gama, ya era bueno. El de 2017 es aún mejor, dejando claro que aún hay margen de mejora en un campo donde la innovación no parece ser el punto fuerte de los fabricantes. Sin embargo, el año pasado no quedaba claro si los nuevos aportes hacían honor al coste del dispositivo. La pregunta, por tanto, es obvia: ¿justifica esta revisión del terminal el elevado precio de la gama más premium de Amazon?
Hace unos días se presentaba el nuevo Kindle Oasis, la versión que propone este año la compañía de Jeff Bezos para el segmento más exquisito del mercado y que supone la segunda versión de un modelo introducido el pasado año. Con un diseño rompedor, el Oasis se alejaba de la estética propia de los libros electrónicos –tanto de la compañía como de otros fabricantes– para ofrecer una experiencia más cómoda en la mano, trasladando el centro de gravedad hacia un único lado y facilitando así su agarre.
Pero faltaba algo que lo hiciese sobresalir de verdad, algo que pudiera catapultarlo de manera definitiva a ser el libro electrónico por excelencia. Con esas intenciones llega una segunda versión que se viste de gala para convencer a cuantos clientes sea posible y continuar llevando la mejor experiencia a los lectores más exigentes.
Como ya ocurría, no es un libro electrónico pensado para conquistar el grueso del mercado debido a su elevado precio, pero sí para aquellos que busquen lo mejor que la tecnología pone al alcance en dicha materia. El nuevo Oasis pule y abrillanta un concepto anterior que, si bien no era malo, sí podía ser mejor. Esta es la prueba.##Mejorando lo excelente
Esta nueva revisión conserva, con salvedades, el diseño que ya vimos el año pasado. Se pueden contemplar así dos partes claramente diferenciadas; una de ellas ultra fina y otra más gruesa (por donde se agarra el libro) destinada a dirigir el peso hacia la palma de la mano y a alojar batería y demás componentes. Es que es más pesado que el anterior -194 vs. 131 gramos- y continúa siendo perfectamente cómodo a una mano, aunque todo lo que sea sumar peso puede suponer una diferencia para según qué personas o usos.
La diferencia más notoria a simple vista es una pantalla que asciende de las 6 a las 7 pulgadas y que se convierte en imprescindible a las pocas horas de uso. Lo hace un poco menos portátil, pero a cambio se gana en una experiencia que ahora se parece más a tener un libro en la mano y añade un 30% más de palabras en cada página. La densidad sigue siendo de 300 ppp, pero la iluminación ahora es algo mejor, adaptándose a la situación gracias a los sensores de luz ambientales. Lo más cómodo aquí es dejar activado siempre el brillo automático, que funciona razonablemente bien.
El segundo cambio que destaca a simple vista es un cuerpo de aluminio que sustituye al plástico para dar una sensación de terminación más premium. Ahora sí rezuma la calidad que ha que tener un libro electrónico que pasa de los 200 euros. Los botones de paso de página de la parte frontal permanecen inalterados, así como el de bloqueo, que ahora se encuentra en soledad en la parte superior –si se agarra de manera diestra– al haber sido traslado el puerto de carga a la zona inferior. En general, el cuerpo de aluminio se agradece no solo en términos estéticos, sino también en lo relativo al tacto, mejorando la sensación de agarre y adquiriendo esos matices que los fabricantes de smartphones llevan tanto tiempo ofreciendo.
Desaparecen del mismo los pines magnéticos en los que se conectaba la funda con batería en el primer Oasis, pues este año las fundas no dotarán de carga extra al terminal. Se acoplan de manera magnética y su utilidad viene dada por la protección que ofrecen, por el desbloqueo automático de pantalla al levantar la tapa y por la posibilidad de mantener el Kindle en vertical, de manera que no hace falta sujetarlo para leer. Estas vienen en dos modelos: una de cuero y otra de tela resistente al agua, que es la que se muestra en las siguientes imágenes. Ambas redoblan la sensación de encontrarnos verdaderamente ante un producto cuidado y que se sitúa un escalafón por encima del resto.
##La versatilidad hecha libro electrónico
Probablemente, lo más llamativo sobre el papel del nuevo Oasis sea la resistencia al agua. Se agradece verla por fin incluida, puesto que aumenta las opciones y disminuye las preocupaciones cuando se trata de sacar el terminal fuera de casa, aunque sin duda hay puntos que son más útiles en lo cotidiano. Es el caso de la nueva opción de accesibilidad para volver la pantalla completamente negra y las letras blancas, ideal para aquellos que leen únicamente por la noche. De por sí, la luz emitida por el Kindle no es nada excesiva, pero con el fondo de color negro lo es todavía menos.
A todo se suman opciones características de Amazon como X-Ray para acceder a contenido exclusivo y relevante del libro, Word Wise para comprender mejor determinadas palabras, el repaso de vocabulario, las anotaciones o el compartir directamente mediante correo electrónico o redes sociales. Junto con las opciones de personalización de lectura para cambiar la letra, disposición de la página, interlineado, fuente, densidad, márgenes y orientación, la lectura es más personal que nunca.
Un punto conflictivo en este Kindle, aparentemente, es el de la batería. No contar con el respaldo de la incorporada en la funda del anterior modelo podría haber llegado a ser un problema, pero no reviste gravedad en el nuevo Oasis. La capacidad de la misma ha aumentado y no resulta para nada dramático no contar con el refuerzo extra de la funda. Eso sí, conviene no abusar demasiado del Wi-Fi si queremos optimizarla al máximo.
9El nuevo Kindle Oasis es un paso más hacia la perfección hecha libro electrónico. Esta búsqueda que ha emprendido Amazon les llevó el año pasado a crear el mejor terminal de su categoría y ahora lo vuelve a hacer con todo lo que ya tenía el anterior pero con unos mejores acabados y características adicionales.
El precio se ha reducido respecto al primer Oasis y, francamente, para los lectores compulsivos a los que no les importe invertir un poco más por una mejor experiencia de lectura, este dispositivo es una opción a considerar de forma seria. Para el común de los mortales, el Paperwhite, más contenido en todos los aspectos, continuará siendo la elección por defecto.- Cuerpo de aluminio que le da, ahora sí, un acabado premium
– Mayor pantalla
– Resistencia al agua
– Muchas opciones de personalización de lectura- Incremento en el peso.